Desde que España y Portugal conquistaron a América Latina la historia que expone es de imperialismo. Hoy Rusia, China y U.E. se pelean por los abundantes recursos naturales de la región desafiando el control tradicional de la clase gobernante de E.U. Los oportunistas jefes locales empezaron a re-orientar sus economías y población para reflejar esta lucha escogiendo su patrón imperialista preferido.
América Latina le sirve como un gran proveedor de recursos naturales a los poderes imperialistas. México, Venezuela, Ecuador y Colombia son grandes exportadores de petróleo, siendo México el segundo proveedor de petróleo a E.U. El descubrimiento reciente de reservas de petróleo en los campos petrolíferos de Cusiana en Colombia garantiza una presencia imperialista continua en la región. Grandes operaciones mineras, como las de minas de cobre en Chile, son vitales para las industrias estadounidenses, chinas, y rusas.
MERCOSUR, juega un papel importante en regular el comercio Suramericano para el beneficio de los poderes imperialistas. Desde su inicio en 1991 ha sido exitoso en fijar los precios de recursos tan bajo que los estados que lo producen no pueden ni mantenerse. E.U. domina el uso opresivo de prestamos condicionados del Fondo Monetario Internacional (FMI) para regular Argentina, Venezuela, Bolivia y Ecuador, mientras los jefes locales luchan por autonomía y ganancias. Para escapar de los imperialistas estadounidenses, Venezuela hace acuerdos petroleros con jefes de China y Rusia. Como resultado Ecuador, y su aliado Venezolano, son los únicos países latinoamericanos que participan en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) una espina desde hace mucho para los jefes de E.U.
En muchas partes de América Latina, las ganancias capitalistas giran alrededor del creciente comercio de la droga. Aunque los jefes de E.U. frecuentemente venden su “guerra contra las drogas”, han orquestado y fomentado el trafico de drogas y han armado bandas quienes llevan acabo el comercio. E.U. fundó y armó los Contras en Nicaragua y grupos paramilitares en Colombia, Guatemala y El Salvador que crean el conducto vital de droga entre Colombia y E.U. Estas pandillas fascistas se crearon en los ochenta para brutalizar a los trabajadores y desanimar a los comunistas de organizarse mientras el mercado más grande de consumidores de narcóticos en el mundo los financiaba, los Estados Unidos. Después que los izquierdistas fueron asesinados la droga siguió fluyendo.
Los poderes imperialistas no se pelean por América Latina por que es pobre. America Latina es rica, solo la gente es pobre. Más de 500 millones viven en la pobreza extrema, mientras por lo menos 15 multimillonarios locales (y más jefes imperialistas) recogen ganancias crecientes de su explotación.
Los capitalistas e imperialistas locales no tienen ningún interés de dar a luz a la situación deteriorante de los trabajadores de América Latina. Mientras la extracción de riqueza de América Latina se hace más frenética la gente se empobrece más. Por ejemplo, en las fábricas de costura en Bolivia de dueños capitalistas coreanos, franceses, españoles, niños trabajan más de 16 horas diarias en talleres de sudor. En cualquier parte de América Latina donde los trabajadores luchan contra esta clase de opresión E.U. y sus intereses empresariales han financiado opresión policiaca y militar para poner a los trabajadores en orden.
En los últimos años, han surgido lideres en América Latina que han tratado de ganar trabajadores con reivindicaciones socialistas y falsas promesas de liberar su país de la atadura del imperialismo estadounidense. Algunos ejemplos prominentes incluyen a Chávez en Venezuela, Lula Da Silva en Brasil y Correa en Ecuador. Estos lideres arrancan el control de E.U. de sus países haciendo tratos con otros poderes imperialistas como China y Rusia. Simplemente cambiando la cara de su patrón, están reubicando sus trabajadores para que otro lado diferente de la creciente pelea de perros imperialista los exploten.
Colombia como anfitrión de nueve bases militares de E.U. se mantiene firme al control de los jefes estadounidenses. Además de su riqueza en recursos naturales Colombia es de estrategia vital para E.U. ya que está geográficamente posicionada para controlar fácilmente el resto de la región. El gobierno, irremediablemente vinculado al comercio de la droga, se reconoce por brutalizar a los trabajadores y destruir sindicatos asesinando sus lideres . El gobierno colombiano sirve como perro-guardián de E.U. en la región, usando su poder militar para intervenir en otras partes de América Latina. En el 2008 Colombia casi empezó una guerra con Venezuela y Ecuador cuando tropas colombianas y estadounidenses cruzaron dentro de Ecuador para asesinara Raúl Reyes el líder de las FARC.
A pesar de estas condiciones horrendas reproducidas por el imperialismo, los trabajadores continúan luchando. El primero de mayo millones de trabajadores por toda América Latina marcharon contra el capitalismo. En algunas de las marchas, los gritos de abajo el capitalismo que viva el comunismo se escucharon. En México, El Salvador, Guatemala, Cuba y Honduras los trabajadores recordaron los mártires de Chicago y pidieron arreciar la lucha contra el control excesivo del sistema imperialista.
El PLP estaba presente en muchas de las marchas alzando la bandera roja, declarando que tenemos un mundo por ganar. Trabajadores han roto barreras y fronteras, para unirse al partido de la clase trabajadora. Trabajadores, ven el sufrimiento de la gente de las mismas injusticias desde México a Afganistán a Brasil han roto barreras uniéndose al partido de la clase trabajadora. En el primero de mayo alzaron la única bandera de la clase trabajadora internacional, la bandera comunista, y llamaron por la revolución. ¡Solo un partido, el PLP, es capaz de destruir el capitalismo y el imperialismo mortal que engendra!