PORT-AU-PRINCE, 22 de Octubre — Jean Filbert Louis fue enterrado hoy.  Fue un maestro que la policía asesino el 8 de octubre mientras participaba en una manifestación con su sindicato (UNNOH) para traer a cientos de miles de niños abandonados por el sistema de educación de vuelta a la escuela. 
Después de un servicio religioso en Eglise de Dieu de Nazon, el cuerpo del camarada Louis fue cargado por cientos de sus camaradas, acompañado de su madre y familia, a las puertas del Ministerio de Educación donde había sido baleado dos semanas antes.
“Aquí esta el premio que nos dieron, el cuerpo de nuestro camarada”, dijo un dirigente de la manifestación.  “Demandábamos escuelas para nuestros hijos, y en respuesta nos dieron un maestro asesinado.”  El Ministerio había ofrecido dinero para pagar el funeral, que fue rehusado enfáticamente – “¡No les daremos la oportunidad de lavar su sangre pagando por el funeral!”
Ellos demandaban justicia por la complicidad del Ministerio en este crimen, que ellos saben significa luchar contra el podrido sistema de “justicia.”  La policía y gobierno están protegiendo y rehúsan actuar contra la mujer policía que cientos de gente vieron claramente cuanto le disparaba en la cabeza al camarada.  Ellos nuevamente demandaban escuelas para los niños abandonados, mejores salarios y condiciones de trabajo para los maestros y ayuda financiera para los padres.  Se deicidio, después de la manifestación, continuar la movilización todos los viernes por la justicia a la familia y sindicato del camarada Louis y para las demandas justas por las que dio su vida. 
La coalición de maestros y otros sindicatos, padres, estudiantes y jóvenes han hecho un llamado por una solidaridad internacional para ayudarles a luchar esta serie de ataques violentos de parte de la policía y las tropas de las UN.  (Ver recuadro para una petición electrónica de apoyo la cual PLP pide a todos sus lectores circular internacionalmente)  La declaración de la coalición lee en parte:
“Este abyecto acto es una clara señal del equipo en el poder hacia la gente y las organizaciones sociales, demostrando su evidente disposición de entrar en una dictadura y prohibir cualquier forma de protesta para demandar mejores condiciones de vida y educación para todos los niños de Haití.  Es una señal tangible del tipo de ‘democracia’ que los poderosos intentan construir: una democracia en donde el derecho a protestar y demandar esta prohibido.  Además, este abyecto acto nos muestra la falta de respeto de a la vida humana en general y a los maestros en particular.”
“También expresa la negación del estado haitiano al derecho de una educación publica de calidad para todos.  Enfrentados por manifestantes que no cargaban nada más que sus pancartas demandando una mejor educación para nuestros hijos y una vida decente y mejores condiciones de trabajo para los maestros y estudiantes,  el gobierno y el Ministro Joel Desrosiers Jean Pierre, escogieron usar sus armas…  El Comité Ejecutivo de la Coalición hace un llamado a todas las organizaciones progresivas aquí y en todos lados, a movilizarse para obtener justicia para la victima y crear una respuesta apropiada, para evitar la repetición de tales actos.”
 El PLP saluda a estos trabajadores que avanzan bajo el fuego, luchando por dar educación a los niños abandonados y por sus propias necesidades.  Cuando ellos tienen bajas,  inmediatamente preparan otra manifestación para continuar la lucha, y llamar a los trabajadores del mundo por apoyo.  La solidaridad comunista les demuestra a los trabajadores haitianos que no están solos a pesar de que los patrones tratan de aislarlos.  Nosotros apoyamos su lucha anti-fascista.
Pero para triunfar sobre la violencia estatal, como todos los trabajadores del mundo bajo la intensificación del fascismo cuando todos los imperialistas se acercan mas a la guerra mundial, ellos deben crear un partido comunista internacional que trabaje junto a otros países simultáneamente.  El PLP en Haití, conectándose a Partidos en la vecina Republica Dominicana,  El Caribe y Centro y Sur América, además de EU y Europa, podría ser una fuerza formidable que presione a través de las fronteras, empujando más allá de los limites reformistas de las batallas actuales a la solución revolucionaria a los problemas de los trabajadores.  
Imagina si le feroz lucha de clases en Francia tuviera redes concretas en la lucha en Haití, Guadalupe, Martiniqués, a través del Partido trabajando entre los migrantes de Haití al resto del Caribe y desde el Caribe hasta Francia.  Tal movimiento revolucionario se construiría a través de campañas de solidaridad como la de Haití, que ha organizado cartas de protesta de los maestros y otros sindicatos en todo el Caribe, Francia, Canadá, Latinoamérica y EU. 
El sindicato de maestros de Boston y el sindicato PSC-CUNY de profesores han enviado dichas cartas y han circulado la petición.  UNNOH y la coalición han publicado estas cartas de diferentes países en la prensa de Haití.  Un maestro haitiano líder sindical hablara en las universidades de Boston y Nueva York esta semana para aumentar la campaña.  Dijo que era el deber de su sindicato ser solidario con trabajadores en la lucha, como la de los maestros que son investigados en una secundaria de Brooklyn por llevar a estudiantes a la marcha por empleos del 2 de octubre en Washington. 
Pero un sindicato o movimiento de masas liberal sin las ideas comunistas, aun si es internacional, siempre se llenara de ilusiones – a pesar de las repetidas lecciones de lo contrario – de que el capitalismo puede dar justicia, educación, techo, agua, salud, empleo y paz.  Al final solo un movimiento global comunista puede crear la unidad internacional  inquebrantable de los trabajadores capas de destruir un sistema decadente, aun bajo el fascismo y la guerra mundial.  Lejos de estar aislados, estos trabajadores y estudiantes en Haití pueden dar liderato a todos nosotros a través del caos y muerte hacia el verdadero cambio que todos buscamos, el cual requiere de una revolución.  Nuestros amigos y camaradas en Haití están siendo templados en acero en la batalla; luchemos todos junto a ellos con la bandera roja que todos debemos cargar.