Mientras el Estado Islamico (EI) pierde piso e influencia sobre el este de Siria, dos organizaciones terroristas mas grandes y letales – las clases dominantes de EE.UU. Y Rusia aumentan su competencia por el control de esta area vitalmente estratégica dentro del rico en petróleo Medio Oriente. El inevitable resultado: mas matanzas para nuestros hermanos y hermanas de clase en Siria. Según el Observatorio Sirio de Derechos Hmanos con base en el RU, desde el 23 de abril al 23 de mayo, mas civiles fueron asesinados por los ataques aéreos dirigidos por EE.UU. que en cualquier otro mes en esta guerra de seis años (Independent, 23/5).
Tan solo en este mes, tratando de proteger tropas terrestres de rebeldes peleando contra Rusia - y el régimen pro-iraní del presidente Bashar al-Assad, los aviones de guerra estadounidenses derribaron dos drones hechos en Iran y un avión de guerra SU22 sirio – “primera vez que el ejercito estadounidense había derribado un avió enemigo desde que un F-16 derribara un MIG-29 de la era sovietica durante el conflicto por Kosovo de 1999” (The New York Times, 19/6). En respuesta, Rusia amenazó con usar como objetivo cualquier avión estadounidense o aliado que vea al oeste Del Río Eufrates. Una guerra sangrientamente que ya ha masacrado y desplazado a millones de trabajadores y sus hijos se estaría convirtiendo en un conflicto inter imperialista mas directo y mas letal.
El desorden catastrófico en el Medio Oriente hoy, es el resultado directo de los esfuerzos por EE.UU. de dominar la region del Golfo Pérsico, desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. En 1980, la Doctrina Carter oficializo que el imperialismo estadounidense frenaría cualquier poder “foráneo” que desfie su hegemonía. Como dijo el difunto asesino de masas Zbifniew Brezinski, consejero de seguridad nacional de Carter, “un ataque así seria repelido por cualquier medio, incluyendo la fuerza militar.”
Aunque la fuerza torpe del imperialismo estadounidense ha garantizado miles de millones de dólares en ganancias para la Exxon Mobil, tambien ha permitido que los poderes capitalistas regionales mal dirijan las masas de trabajadores y apropiarse de piezas mas grandes del pastel petrolero. En 1979, los mullahs iraníes obtuvieron poder derrocando al odiado Shah de Iran, quien había sido instalado para proteger los intereses petroleros estadounidenses y británicos después que la CIA ingeniara un golpe para derrocar al presidente electo (Guardian, 19/8/13). En la década de 1980 Saddam Hussein, antes que estuviera en la lista estadounidense de los mas buscados, fue apoyado por el poder estadounidense durante la guerra Iran-Irak.
La CIA incubo a al-Qaeda en Afganistán, El Estado Islamico nació de la manipulación del sentimiento anti-estadounidense de las masas después de la invasion a Irak del 2003.
Hoy, mientras los patrones estadounidenses encuentran la forma de moldear eventos corroídos, las clases dominantes en Rusia e Iran se hacen mas agresivas. Hasta los aliados tradicionales de EE.UU. como Turquía, Arabia Saudita, e Israel están trazando formas mas independientes de desafiar el dominio estadounidense.
Imperialistas Asesinan Con
Impunidad
La lucha de los gobernantes estadounidenses por controlar el petróleo y Gas Natural del Medio Oriente ha sido un desastre para la clase trabajadora mundial. Según Doctores por la Responsabilidad Social, con base en Washington, DC, el numero de muertos de la “Guerra al Terror”, que comenzo después del 11/9 podría llegar hasta los dos millones (Middle East Eye, 18/4/16). Ese numero no incluye los millones asesinados en la Guerra del Golfo en 1991 y las sanciones asesinas estadounidenses a Irak, que le siguieron. Además de las 500,000 vidas de niños iraquíes de las zonas de exclusión aérea del presidente Bill Clinton en los 1990, de las cuales Madeliene Albright, secretaria de estado de Clinton, consideraba que “valían la pena”.
Ahora, buscando arrancar ese territorio del control del EI, las fuerzas de la coalición estadounidense cometen crímenes de guerra en centros urbanos en Siria y su vecino Irak. Según Human Rights Watch(4/6):
En Mosul y Raqqa, las fuerzas dirigidas por EE.UU. usan proyectiles de artillería M825-series 155mm que contienen 116 cuñas impregnadas de fósforo blanco, el cual se incendia y sigue prendido al ser expuesto al aire…fragmentos de fósforo blanco pueden exacerbar las heridas aún después de ser tratadas y puede entrar al flujo sanguíneo y causar el fallo de multiples órganos. Las heridas ya tratadas se pueden volver a prender al ser expuestas al oxigeno cuando se cambia el vendaje. Aun las heridas leves pueden resultar fatales.
Crisis de Refugiados
Según La Oficina Para la Cordinacion de Asuntos Humanitarios de las NU, la propagación de las batallas ha creado una crisis humanitaria, con 6.1 millones de desplazados internamente y 4.8 millones buscando refugio en el exterior. Para mediados del 2016, según Human Rights Watch, aproximadamente 1 millón de personas vivían en areas sitiadas, sin acceso a asistencia o ayuda humanitaria. Un reciente brote de polio recalca los riesgos a la salud de la población, y en particular a niños (NYT, 20/6).
La Guerra Perpetua Es Ahora lo
Normal
Ya que el conflicto en Siria se ha convertido en el mas intenso combate urbano desde la Segunda Guerra Mundial, vivir con la sosobra de mas guerra se ha convertido en algo “normal” para la clase trabajadora internacional. Las atrocidades del imperialismo estadounidense son ya una rutina, algo que pasa en la vida diaria. Este es un gran peligro para nuestra clase, especialmente sin un movimiento anti-imperialista masivo. En la era de la Guerra de Vietnam, los movimientos influenciados y dirigidos por comunistas alrededor del mundo lucharon contra estas atrocidades iperialistas. Hoy, después de la inversión de las revoluciones en la Unión Soviética y China, la lucha de los trabajadores ha sido callada o mal dirigida por falsos izquierdistas, nacionalistas racistas, y fundamentalistas islamicos. El desafío para el Partido Laboral Progresista es: recoger la bandera roja y dirigir a los trabajadores del mundo hacia la única solución: La Revolución Comunista.
Solo la revolución comunista acaba con las condiciones que crean la guerra imperialista. Solo una dictadura del proletariado permite que los trabajadores decidan cual guerra vale la pena pelear. En 1917, cuando los bolcheviques dirigieron a trabajadores, soldados y campesinos a quitarle el poder a la clase dominante rusa, una guerra inter-imperialista (Primera Guerra Mundial) fue transformada en una guerra de clases. La lección abrumadora de ese evento es que la guerra imperialista significa muerte para los capitalistas si la clase trabajadora rechaza el patriotismo y abraza el internacionalismo proletario. Cada trabajador es un soldado en la guerra de clases. Cuando los trabajadores de EE.UU., Rusia, Irak, Siria, Iran, y mas allá pongan la consciencia de clases sobre la identidad nacional, el fin de la guerra en el Medio Oriente estará a la vista.