CHICAGO, 24 de marzo— Un contingente multiracial y multigeneracional de camaradas del Partido Laboral Progresista se unió a la atronadora acción March for Our Lives en Union Park. Era evidente cuánta violencia cruel con armas de fuego resonaba entre los estudiantes y los padres. El PLP transmitió nuestra línea revolucionaria comunista de que la violencia armada proviene de un sistema capitalista inherentemente violento y racista.
El contingente del PLP distribuyó al menos 500 DESAFÍOS y más de 1.000 volantes en la entrada del parque. El volante conectó estos tiroteos masivos a la decadencia violenta del capitalismo. Muchos manifestantes, especialmente los jóvenes, fueron receptivos a nuestra política comunista y se pusieron al tanto de los cánticos que comenzamos, incluyendo: “Da la vuelta al arma, dispararles a los jefes”.
Liberales Explotan Sufrimiento de Obreros
Para contrastar el canto liberal y pro-partido Demócrata de “¡Votemos contra ellos!” - refiriéndose a los pro-NRA, los políticos republicanos en el Congreso-PLPistas cantaron “¡Más grande que NRA, más grande que las armas!” Es esencial llamar a los racistas jefes liberales oportunistas, como los que organizaron esta marcha principalmente blanca y sin mucha clase trabajadora. Estos hipócritas explotan cínicamente la ira y el dolor de la clase trabajadora como parte de su plan para canalizar a los trabajadores a su juego de votación sin salida y sostener su sistema de ganancias mortal.
Los demócratas han demostrado ser tan letales e indiferentes al sufrimiento de los trabajadores como sus contrapartes republicanas, si no más. Ya sea haciendo la vista gorda a la violencia racista que devasta los vecindarios negros y latinos aquí en Chicago, lanzando bombas sobre nuestras hermanas y hermanos de clase trabajadora en el Medio Oriente, o deportando a decenas de familias a una muerte casi segura en Centroamérica, constantemente mostrar dónde están sus intenciones e intereses.
Capitalismo depende de la violencia
Todos los políticos al final del día sirven al sistema capitalista, que necesita violencia estatal como asesinatos policiales racistas, deportaciones y guerra imperialista para poder sobrevivir. Solo una sociedad comunista, liderada por un PLP masivo internacional, puede romper la alienación, la desesperación y la incesante búsqueda de ganancias en el capitalismo que destruye millones de vidas de trabajadores cada año.
El comunismo es el mejor método posible para eliminar la violencia generalizada que presenciamos hoy. Revolucionaremos la sociedad alejándola de la desigualdad y la competencia. Eso requerirá una violencia de clase organizada y revolucionaria contra los patrones y su estado. Los trabajadores de todo el mundo estarán armados con la política comunista. A través de una lucha prolongada, construiremos un mundo basado en la igualdad, la cooperación y el poder de los trabajadores.
Aunque estos jefes liberales racistas y sexistas son los que dirigen estas manifestaciones masivas hoy en día, su influencia puede y debe ser expuesta por la mentira mortal que es.
Es nuestra responsabilidad como comunistas sumergirnos en la lucha con estas masas de jóvenes y padres, para construir la solidaridad de la clase trabajadora y la conciencia de clase. Al hacerlo, podemos ampliar el objetivo más allá de Trump y la NRA, al de todo el sistema violento y podrido del capitalismo.
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Texas, 24 de marzo—Trayendo ideas comunistas a las masas, el Partido Laboral Progresista y amigos se unieron a miles en Texas en las Marchas por Nuestras Vidas.
Participamos en la marcha anual de Cesar Chávez y la de Marcha por Nuestras Vidas, ambas realizadas el mismo día. Distribuimos cientos de volantes que expusieron el papel central de la violencia de los patrones en contra de la clase obrera bajo el capitalismo.
El día antes de la marcha en Houston, hicimos pancartas y compartimos ideas de las consignas en un evento en una escuela donde hablamos de como la violencia con armas es un síntoma del violento sistema capitalista. El próximo día, un grupo de 10 estudiantes secundaria, maestros y padres se unieron a una protesta fuerte de 15.000 en un esfuerzo para empujar la política de la manifestación a la izquierda. Mientras la marcha continuaba, hicimos consignas de “No Trump, No NRA, ¡No EEUU fascista!” que se escuchaban por todo el centro.
Marchamos del parque del centro a las oficinas del senador Ted Cruz, las que se pusieron como blanco los organizadores liberales de la marcha por su apoyo a la Asociación Nacional de Armas (NRA). La meta principal de los organizadores era registrar más votantes y expandir su apoyo por los candidatos demócratas en las elecciones congresionales de este otoño. Aunque es fácil desenmascarar a republicanos súper racistas como Donald Trump y Cruz, debemos también exponer los demócratas racistas como representante de EE.UU. Henry Cuellar, quien empujó el programa de deportación de “Comunidades Seguras” que ha intensificado el ataque hacia los inmigrantes.
Mientras nos acercábamos a la oficina de Cruz, los manifestantes corearon, “hey, hey, ho, ho, Ted Cruz tiene que irse!” El mensaje principal de los líderes de la marcha más que todos los manifestantes blancos era que deberíamos enfocarnos en votar a Cruz fuera de la oficina. Me volteé a una maestra hispana y a los estudiantes en nuestro grupo, quienes eran negros y latinos, y dije que deberíamos hacer un coro en español. Todos estuvieron de acuerdo.
Grite que no solo los políticos como Ted Cruz habilitan tiroteos masivos en nuestras escuelas, pero que también son racistas anti-inmigrantes. Urgimos a la gente a que se unieran a nuestro coro de: “Ted Cruz Escucha, Estamos en la Lucha!” Los manifestantes mayormente blancos se unieron, y seguimos coreando lo más que pudimos. En vez de pedirles a todos que voten, les estábamos diciendo a los patrones que la clase obrera multirracial esta lista para luchar en contra del racismo.
Después, una estudiante de secundaria y organizadora de la manifestación se acercó a nuestro grupo y dijo que le gustó nuestro coro en español. Hablamos por un rato e intercambiamos información. La vamos a contactar para organizarnos a la próxima ronda de las manifestaciones escolares nacionales del 20 de abril.
Para nuestros estudiantes, esta fue su primera protesta. A pesar de un poco de vacilación inicial, un número de ellos salieron y no tenían miedo de liderar las consignas y empujar la marcha a la izquierda. Un par de estudiantes hicieron contactos y están planeando acciones futuras. Están surgiendo como líderes. La marcha fue un recordatorio valioso que cuando uno hace el anti-racismo el centro de lo que uno hace, la clase obrera nos seguirá.
Mientras se acercan el 20 de abril y el Primero de Mayo, continuaremos poniendo las ideas del partido al frente y entrenar a los estudiantes a combatir por la clase obrera.
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