El 1 de abril, los gobernantes de Israel atacaron el complejo de la embajada de Irán en Damasco, Siria, lo que equivale a bombardear al propio Irán, según el derecho internacional de los capitalistas. Mataron a 11 trabajadores y dos generales iraníes vinculados a la “guerra en la sombra” del país contra Israel. El mismo día, Israel atacó y bombardeó deliberadamente tres automóviles en Gaza que transportaban a trabajadores humanitarios de World Central Kitchen(WCK), según el fundador de WCK, José Andrés. Este no fue un incidente aislado. Con un cheque en blanco para armas y bombas de Estados Unidos, Israel ha asesinado a doscientos trabajadores humanitarios y a más de 33.000 palestinos, la gran mayoría de ellos mujeres y niños no combatientes, según el secretario de “Defensa” de Estados Unidos, Lloyd Austin (alajazeera.com, 3/1). El flujo de armas y las atrocidades continúan a pesar del falso llamado de Genocidio Joe Biden a un alto el fuego mientras le da una palmada en la muñeca a su desafiante perro faldero, el presidente israelí y asesino en masa Benjamín Netanyahu.

Las ganancias capitalistas y el genocidio racista siguen estando en el centro de la matanza unilateral de trabajadores en Palestina. Los imperialistas estadounidenses han dependido durante mucho tiempo de Israel como su representante militar en Medio Oriente, un “grupo de portaaviones” permanente para los intereses petroleros estadounidenses. Pero ese acuerdo está ahora bajo ataque. Una guerra más amplia se avecina en Medio Oriente, una guerra que podría escalar hasta convertirse en una Tercera Guerra Mundial interimperialista. En un conflicto global total, la devastación de la clase trabajadora internacional se intensificará exponencialmente. Es hora de que todos los trabajadores conviertan estos ataques en una guerra de clases antirracista contra todos los imperialistas y capitalistas bajo el liderazgo del Partido Laboral Progresista comunista internacional.

Muchas bandas capitalistas más pequeñas de la región se han aliado con el Irán imperialista contra Estados Unidos e Israel, incluidas Hamás y la Jihad Islámica en Palestina, Hezbolá en el Líbano, los hutíes en Yemen y una serie de milicias en Siria e Irak. Con financiamiento y armas de Irán, junto con las armas ideológicas del nacionalismo y la religión de los capitalistas, estos grupos han ganado un amplio apoyo entre los trabajadores que están luchando valientemente contra la maquinaria de guerra sionista. Pero incluso si los líderes engañosos de los grupos tienen éxito, no pueden ofrecer nada más que más explotación de la clase trabajadora bajo el pretexto del antiimperialismo. ¡El comunismo, no un nuevo conjunto de patrones capitalistas, es lo que nuestra clase necesita para su liberación!

La influencia de los patrones Iraníes

Los patrones estadounidenses han estado intentando, sin éxito, derrocar a los patrones de Irán desde que la “revolución” iraní de 1979 derrocó a su lacayo, el Shah de Irán. ¿Qué impide que los imperialistas estadounidenses y sus socios criminales menores en Israel lancen ataques genocidas contra el propio Irán? Las alianzas regionales de Irán y sus vínculos económicos y políticos cada vez más profundos con los archirrivales de Estados Unidos lo convierten en un enemigo más formidable que Hamás. Tanto los imperialistas chinos como los rusos están ignorando las sanciones internacionales y comprando grandes cantidades de petróleo a Irán (Reuters, 10/11/23).

Irán también tiene influencia militar y geográfica. Alrededor de 17 millones de barriles de petróleo, alrededor del 20 por ciento de la demanda mundial total, pasan por el Estrecho de Ormuz cada día (strausscenter.org). Si Irán obstruyera el estrecho, causaría un caos económico global. La topografía montañosa de Irán es una fortaleza natural contra las potencias invasoras. Finalmente, Irán ha adaptado gran parte de su armada para defenderse de los imperialistas estadounidenses con una armada de lanchas rápidas equipadas para una guerra de guerrillas naval.

Israel, Estado paria racista

Los trabajadores de todo el mundo están demostrando que no aceptarán el genocidio de Gaza de brazos cruzados. Millones de personas han protestado contra Israel, que se ha convertido en un Estado paria. El 4 de abril, siete trabajadores árabes de Israel y cuatro palestinos de Cisjordania intentaron asesinar a Ben Gvir, el fascista jefe de seguridad nacional de Israel. Desafortunadamente, el movimiento pacifista de Israel todavía está atrapado en la ideología sionista y se centra en los aproximadamente cien rehenes israelíes en Gaza mientras ignora en gran medida a las decenas de miles de víctimas palestinas de la cruel limpieza étnica de Israel. Una reciente convocatoria de elecciones, independientemente de cómo resulte, no cambiará el compromiso de Israel con el apartheid en Cisjordania y el encarcelamiento masivo al aire libre en Gaza.

El aumento de la oposición global a Estados Unidos puede parecer algo bueno. Pero debemos tener cuidado con los motivos de estos oponentes cuando pertenecen a la clase dominante capitalista. A medida que el imperialismo estadounidense declina, China, Rusia y sus aliados buscan oportunidades para avanzar en Medio Oriente y otros lugares. No importa quién salga victorioso en el próximo gran conflicto de los patrones, los trabajadores perderán, a menos que giren las armas para librar una guerra de clases contra nuestros opresores. Sólo una clase trabajadora unida y multirracial dirigida por un partido comunista revolucionario puede poner fin al ciclo de guerras imperialistas para volver a dividir el mundo con fines de lucro. ¡Los trabajadores no tienen perro en esta lucha!

El Partido Laboral Progresista alienta a todos aquellos indignados por la devastación de Gaza a construir una base para el comunismo y el PLP entre los trabajadores del mundo. Sólo la revolución comunista puede poner la explotación capitalista, el racismo, la guerra imperialista y la catástrofe climática en el basurero de la historia. ¡Sólo el comunismo puede permitir a la clase trabajadora escribir nuestro propio futuro! ¡Únete a nosotros!

NUEVA YORK, NY, 30 de marzo—Un poderoso contingente multirracial, multigeneracional e internacional de 30 miembros y amigos del Partido Laboral Progresista (PLP) marchó para conmemorar el 48º aniversario del Día de la Tierra, llevando a las masas de trabajadores nuestro mensaje comunista revolucionario. En este día de 1976, masas de trabajadores en Palestina rompieron con la no violencia y abrazaron la rebelión militante en respuesta a las confiscaciones fascistas de tierras lanzadas por Israel y al asesinato de seis trabajadores desarmados. En 2024, en todo Estados Unidos, de forma casi constante, miles de trabajadores y estudiantes se manifiestan contra el genocidio financiado por Estados Unidos en Gaza.

En la ciudad de Nueva York, el PLP, con su docena de banderas rojas e ideas y cánticos comunistas, se unió a la multitud que gritaba: “Joe Biden, no puedes esconderte. Estás cometiendo genocidio”, y añadió nuestra propia línea política más aguda: “¡Capitalismo, no te puedes esconder! Estás cometiendo genocidio”.

Durante la marcha, distribuimos más de 700 ejemplares de Challenge-Desafío y la misma cantidad de volantes escritos específicamente para el evento con la ayuda de jóvenes trabajadoras palestinas que nos enseñaron un nuevo canto árabe , “Desde Gaza se ha decidido: ¡aplastaremos el asedio! La palabra “hisar”  tiene un segundo significado: frontera. Este canto revela lo que los trabajadores en Palestina ya saben: el bloqueo fascista de Gaza por parte de Israel expone la violencia de clase racista inherente y esencial a TODAS las fronteras capitalistas. Sólo el comunismo puede comprender el significado pleno de este canto.

También contrarrestamos los cánticos nacionalistas con cánticos internacionalistas de “¡Asiáticos, latinos, blancos y negros, trabajadores del mundo, uníos!” y corearon “¡Lucha por el comunismo, ahora es el momento!” para que las masas sepan que el comunismo es la única forma en que todo el planeta y la clase trabajadora estarán libres del desplazamiento violento y el genocidio.

Antes de la manifestación, los miembros del PL se acercaron a sus amigos de los lugares de trabajo, escuelas y vecindarios para marchar con nosotros. A una profesora jubilada de una universidad de Nueva Jersey se le unió su amiga, también profesora, que había sido atacada por los administradores de su campus cuando publicó una caricatura política criticando al ejército y al gobierno israelíes por su matanza masiva de palestinos, incluidos miles de estudiantes. Este maestro fue atacado por el grupo sionista Canary Mission, que navega por Internet para identificar a profesores y estudiantes que critican las políticas israelíes y luego se comunica con grupos comunitarios sionistas y organizaciones estudiantiles en campus para presentar quejas. Esta miembro de la facultad fue víctima de tal queja, pero su respuesta no fue retroceder sino involucrarse más.

Consciente de que, en manifestaciones recientes, la policía ha estado confiscando agresivamente megáfonos y arrestando a manifestantes, el PLP mantuvo nuestro contingente estrechamente organizado, permitiéndonos llevar nuestro mensaje de solidaridad internacional y visión de un futuro comunista a los trabajadores que nos rodean. Cada persona tenía un amigo y números de teléfono en caso de interferencia policial. La gran multitud también ayudó a brindar seguridad a todos los manifestantes.

El ataque cada vez más intenso, con Estados Unidos ampliando su ayuda a Israel para la guerra en el extranjero y atacando agresivamente a activistas que protestan contra estas políticas en casa, refleja la crisis cada vez más profunda del capitalismo estadounidense. Según la organización de derechos civiles Palestina Legal, más de 2.000 profesores y estudiantes han sido disciplinados o despedidos por sus protestas contra las políticas de los gobiernos de Estados Unidos e Israel. La animada manifestación y nuestra cuidadosa planificación y organización dejaron a nuestros participantes con una nueva determinación de construir para la próxima marcha del Primero de Mayo y llegar a más amigos y compañeros de trabajo para convencerlos de la importancia de construir un movimiento de masas para el comunismo.

Como comunistas en el PLP, entendemos que sólo cuando la clase trabajadora dirija la sociedad se liberarán los trabajadores y la tierra. Ni las elecciones falsas ni los engañosos politiqueros palestinos pueden lograrlo. Mientras las masas de trabajadores en Palestina cantan: “¡Desde Gaza, se ha decidido, aplastaremos el asedio! “Está claro que los trabajadores de Gaza merecen nada menos que un mundo comunista. Desde Gaza hasta México, sólo la revolución comunista puede romper el asedio y aplastar las fronteras nacionalistas matando a nuestra clase. Únase al PLP y hagamos realidad estas palabras.

El 17 de abril el Partido Laborista Progresista (PLP/PL) celebrará su 59 año de lucha contra el sistema canceroso llamado capitalismo, un sistema que destruye las vidas de los trabajadores en todo el mundo. El PLP surgió en la década de 1960 escindidos del reformista Partido Comunista de Estados Unidos. Empezamos con apenas dos docenas de miembros. En 2024 seremos internacionales y lucharemos por la organización del Partido en los cinco continentes.

Los obreros de todo el mundo se encuentran actualmente en un período de baja conciencia de clase y de lucha contra los capitalistas del mundo. A este período lo llamamos Noche Oscura. Se caracteriza por la rivalidad inter-imperialista entre los imperialistas estadounidenses y la alianza de imperialistas chino y rusos. A medida que esta rivalidad aumenta, los imperialistas están recurriendo a niveles cada vez mayores de guerra y fascismo para dividir, matar y controlar a los trabajadores en todas partes del mundo. La clase obrera necesita desesperadamente un partido comunista luchador que nos saque de esta Noche Oscura y nos lleve a una lucha victoriosa en contra los capitalistas del mundo.

Nuestra Línea y Nuestra Visión

El Partido Laborista Progresista lucha por un mundo comunista dirigido por y para los obreros. El capitalismo ha provocado guerras mundiales que han costado la vida a millones de trabajadores y los capitalistas se están preparando para la Tercera Guerra Mundial. En un mundo gobernado por la clase obrera, todos los bienes y recursos se compartirán según las necesidades. No habría producción para el beneficio de unos pocos. No habría necesidad de guerras lucrativas. La clase trabajadora sólo necesita darse cuenta de su potencial ilimitado para luchar y gobernar. El PLP ha luchado y seguirá luchando junto a sus compañeros trabajadores para ayudarnos a realizar este potencial.

Para realizar este potencial, el PLP implementa una estrategia de práctica y teoría. Nos involucramos en la lucha contra los jefes (práctica). Analizamos nuestra lucha y las luchas de los trabajadores en todo el mundo. Analizamos la situación mundial. Luego implementamos lo que aprendimos en luchas futuras y lo aplicamos a nuestra línea (teoría). Estas lecciones y creencias juntas conforman la línea política única del Partido Laborista Progresista. A continuación, se presentan algunos elementos de la línea del PLP, obtenidos a partir de 59 años de práctica y teoría:

La sociedad debe ser dirigida por y para la clase obrera. Eso es comunismo.

Hay que abolir el sistema salarial y el propio dinero. Los recursos deben distribuirse en función de las necesidades.

Los trabajadores sólo pueden ganar poder mediante la lucha armada. Los patrones no se rendirán pacíficamente.

Rechazamos el concepto de naciones; sin nacionalismo y sin fronteras. Todos somos obreros y un trabajador en Israel se parece más a un trabajador en Gaza que a un capitalista israelí.

Unidad multirracial: el racismo es un producto y una herramienta de la clase capitalista dominante destinada a dividir y conquistar a la clase obrera. Una clase trabajadora unida y multirracial es imparable.

Anti-sexismo: La superexplotación, opresión y cosificación sistémicas de las mujeres divide y debilita a la clase obrera.

Necesitamos concentrarnos entre los trabajadores industriales y los soldados, clave para derrotar a los capitalistas.

Luchamos por inyectar estas ideas en cada lucha y continuaremos haciéndolo hasta que la clase trabajadora gobierne el mundo. (Para obtener más información, consulte Nuestra lucha en la página 2)

Un legado de lucha y teoría

Desde su nacimiento en 1965, el Partido Laborista Progresista ha estado luchando contra los ataques de los patrones hacia los obreros. Hemos organizado y apoyado a los trabajadores automotrices y a los maestros en huelga en México; mineros en huelga en Hazard, Kentucky; trabajadores de la fibra en la India; trabajadores bancarios en Colombia; sentados en huelga en la planta Chrysler de Mack Avenue en Detroit; trabajadores agrícolas en California y trabajadores de panadería en Stella D’Oro en el Bronx. Hemos apoyado a los trabajadores desalojados en Palestina-Israel, a las víctimas del terremoto en Pakistán y a las víctimas de huracanes en Haití y Nueva Orleans. Más recientemente, el Partido se ha organizado con inquilinos que luchan contra los abusivos dueños de los barrios marginales en Lennox, California, hemos apoyado a estudiantes que enfrentan políticas escolares racistas en el condado de Prince George, Maryland, y hemos luchado junto a familias en Newark, Nueva Jersey, heridos físicamente por policías racistas.

La lucha en contra el racismo siempre ha sido un principio fundamental del PLP. Respaldamos a los trabajadores y jóvenes negros en la rebelión de Harlem de 1964 y luchamos contra los segregacionistas escolares racistas en Boston en 1975. En 1976 integramos el Marquette Park de Chicago, mientras destrozábamos al cuartel general nazi allí. Hemos liderado a más de 100.000 manifestantes contra el Ku Klux Klan y los neonazis en todo los Estados Unidos. Nos hemos movilizado contra policías asesinos racistas desde Brooklyn, Los Ángeles, Chicago y Ferguson, Missouri.

El PLP ha liderado intensas luchas contra las guerras patronales. En la década de 1960, fuimos los primeros en organizar manifestaciones masivas en contra de la guerra imperialista estadounidense en la guerra de Vietnam. Trabajamos tanto dentro del ejército como en las calles para exponer la invasión de Irak por parte de los gobernantes estadounidenses como una apropiación masiva de petróleo. Más recientemente, el PLP ha participado en luchas en contra la ocupación genocida de Palestina por parte de los patrones, diciendo que este ataque a los obreros en Gaza tiene como objetivo las ganancias y no se resolverá luchando por un Estado palestino gobernado por un nuevo grupo de capitalistas.

Estas ideas, luchas y victorias surgieron directamente del análisis de nuestro Partido de las luchas de clases pasadas y los logros de millones de obreros. El PLP estudió y continúa estudiando las fortalezas y debilidades del movimiento comunista a lo largo de la historia. En 1917 este movimiento creó una revolución en Rusia; En 1949, ¡una revolución en China, dos de los países más grandes del mundo bajo la bandera roja del comunismo! Pero el PLP también reconoce las debilidades de los movimientos pasados. El nacionalismo, permitir que persistan los salarios y el dinero y permitir que se forme el elitismo dentro de las estructuras partidistas son algunos de los errores de los viejos movimientos que condujeron al renacimiento del capitalismo. Estamos comprometidos a no repetir estos errores.

Celebra la fiesta el Primero de Mayo

El próximo mes es el Primero de Mayo, donde cada año el Partido celebra el comunismo y la clase obrera. Sería un honor para nosotros que se unieran a nosotros en estas celebraciones y se unieran a nuestro Partido en esta lucha por un mundo comunista. Contribuyamos todos y construyamos una clase obrera unida y multirracial capaz de ganar un mundo comunista. ¡Feliz cumpleaños PLP!

BROOKLYN—“No debería temer por mi vida por venir al campus”, declaró un trabajador de un carrito halal a los miembros del club antirracista Common Ground del Kingsborough Community College. Durante meses, el carrito halal ha sido objeto de ataques racistas, incluidas pintadas racistas anti palestinas (véase CHALLENGE, 3/13). Aunque los racistas pretendían aterrorizar a los trabajadores y estudiantes del KCC para que se atemorizaran y callaran, ellos y los jefes capitalistas a los que sirven cometieron un grave error de cálculo. En medio del genocidio en Gaza, el aumento de las guerras imperialistas y la agudización del fascismo, los estudiantes antirracistas y los comunistas del Partido Laborista Progresista están trabajando duro para construir una lucha masiva, multirracial y antirracista.

Luchar por la unidad, la solidaridad y la colectividad

Desde que empezó el semestre, Common Ground se ha reunido periódicamente para debatir la mejor manera de responder a estos ataques racistas, con nuestras nuevas estudiantes asumiendo el liderazgo y aprendiendo de las experiencias de nuestras estudiantes veteranas. Recientemente, además de endurecer las normas contra la organización estudiantil, nos sorprendió y disgustó descubrir dos nuevas cámaras de seguridad instaladas a ambos lados de nuestra sala de reuniones. Todo el mundo estuvo de acuerdo en que esto parecía una violación, y uno de nuestros nuevos estudiantes declaró: “Este campus se parece cada vez más a un estado policial y no a una universidad”. Otro estudiante preguntó: “¿Por qué se molestan en espiarnos, creen que estamos infringiendo la ley?”. 

La expresión “Estado policial” plantea una pregunta importante: ¿qué es el Estado? ¿Qué tiene que ver la administración del KCC con el Estado? ¿Y cuál debe ser la actitud de los trabajadores hacia el Estado?

El Estado capitalista y la revolución comunista

Los Estados surgieron cuando, tras unos 315.000 años de sociedades humanas, apareció la división de la sociedad en clases, entre explotadores y explotados. El Estado surgió como un grupo especial de personas que se ocupaban de gobernar, aparentando ser neutrales y ajenos a la sociedad. Sin embargo, en realidad imponen una dictadura de la clase explotadora a través de otros grupos especiales a los que se concede la autoridad legal para utilizar la violencia y encarcelar a quien la clase dominante considere un enemigo. En el capitalismo, esta realidad queda oscurecida por capas de apariencias como el sistema judicial y la sofisticada propaganda sostenida por los medios de comunicación capitalistas, las escuelas, las películas, la música y la mayoría de los medios sociales. 

Los capitalistas siempre tratarán como criminales a los luchadores antirracistas por la unidad multirracial. El racismo y el sexismo, junto con el nacionalismo, son los pilares que sostienen todo su sistema de ganancias para mantener a la clase obrera políticamente dividida, diferencialmente oprimida y económicamente explotada. Especialmente los trabajadores negros están superexplotados y, a través del terror policial racista, los policías de la patronal aterrorizan intencionadamente a los trabajadores negros e inmigrantes en las calles, en las escuelas y en sus propias casas. 

De este modo, el estudiante que observó que el KCC parece un estado policial ¡tiene más razón de lo que creía! El estado capitalista en los EE.UU. hoy incluye a todos, desde Joe Biden a la policía de Nueva York, a la administración de cada campus de CUNY. Armarnos con la política comunista expone las falsas promesas sin salida de las reformas liberales. Los comunistas luchamos por formar políticamente a toda la clase obrera internacional para defendernos de los ataques capitalistas a corto plazo y organizar a toda nuestra clase para aplastar todo este sistema genocida y sexista con la revolución comunista y un estado obrero propio. 

BUSCADO por terror racista: capitalismo

Guiados por esta política, los miembros de PL apoyaron la decisión de Common Ground de crear un cartel de “SE BUSCA POR DELITO DE ODIO RACISTA”. La policía de Nueva York -que tuvo que ser presionada para responder a este ataque racista en primer lugar- sólo colocó dos carteles de “SE BUSCA”, en una esquina desolada fuera del campus con escaparates vacíos en su mayoría. Tras semanas de debate, decidimos que, en lugar de confiar en la policía de Nueva York, copiaremos las imágenes del sospechoso racista captadas por las cámaras de vigilancia y crearemos las nuestras propias. También creamos una petición con una lista de demandas, entre ellas denunciar la negativa del KCC a reconocer que este crimen de odio había ocurrido y recaudar dinero para cubrir los daños causados al carrito halal.  

Desde entonces, los miembros de Common Ground y PL’ers han asistido a las oraciones y iftar (cuando los trabajadores musulmanes rompen su ayuno durante el mes de Ramadán) en una mezquita de la comunidad varias veces, haciendo amigos, distribuyendo el volante WANTED ampliamente, y despertando la indignación y la voluntad de construir un movimiento de masas en torno a la lucha. Nos estamos organizando para el Primero de Mayo, y planeamos seguir discutiendo las agudas observaciones de los estudiantes sobre el capitalismo y las preguntas aún más agudas sobre el comunismo en nuestro grupo de estudio del PLP. ¡La lucha continúa!