Por ocho días seguidos, Israel armado por EEUU, bombardeo civiles palestinos en lo que el New York Times llamo “una practica para cualquier confrontación armada contra Irán” (23/11/12). Mientras tanto el Presidente Barack Obama viajaba por el Sureste de Asia para reunir aliados en un posible conflicto con China.
Estas acciones minimizan el dilema fundamental que enfrentan los capitalistas de EEUU. Están desesperados por mantener su estatus de líder mundial, pero no están aun listos para las guerras regionales que asoman conforme la rivalidad imperialista se intensifica. Obama esa listo para extender sus aventuras militares más allá de Irak, Afganistán, Pakistán, Somalia y Yemen, pero no ha podido construir la unidad domestica y el patriotismo que sus amos de la clase dominante necesitan. Además, los patrones de EEUU no poseen el apoyo internacional para asegurar las rutas de gas natural afgano y petróleo iraquí contra milicias islámicas.
Las luchas entre facciones han desestabilizado Irak y limitado la capacidad de ExxonMobil de apenas extraer la mitad de su meta petrolera. El talibán y las milicias islámicas han impedido la construcción del gaseoducto que se extienda a través de Afganistán desde Asia central. Los imperialistas de EEUU, mientras luchan en estas arenas pequeñas, saben que será mucho más difícil enfrentar los militares de Irán y China.
La necesidad de imponer una disciplina aun más fascista contra trabajadores de EEUU, quienes están cerca de rebelarse, complica el avance de los patrones hacia las guerras extensas que necesitan. Estos trabajadores sufren de desempleo racista, extensa pobreza, (46 millones viven bajo la línea de pobreza) y el masivo encarcelamiento de mas dos millones de trabajadores negros y latinos y jóvenes. Todos estos ataques también disminuyen salarios y condiciones de los trabajadores blancos.
Enfrentamiento entre Gobernantes de EEUU
Los patrones de EEUU están en desorden. Los más importantes capitalistas están enfrentados sobre la mejor manera de movilizarse y hacer la guerra.  Tras bambalinas, su disputa supuestamente le dio forma a las elecciones enfocadas en impuestos y al escandalo que involucra al ex jefe de la CIA, David Petraeus. [Ver pg. 5] Los patrones menos poderosos, Partido del Te, quienes cuestionan la necesidad de una guerra foránea bajo cualquier circunstancia, fueron desdeñados en el circo electorero.
Existe un desacuerdo básico entre lo que presenta Obama, apoyado por Colin Powell y el enfoque favorecido por la administración de George W. Bush, apoyada por el ex vice-presidente Richard Cheney y Secretario de Guerra Donald Rumsfeld. La Doctrina Powell requiere la creación a largo plazo de una fuerza sobrecogedora de EEUU dentro de una gran coalición internacional. La facción de Chehey-Rumsfeld prefiere la guerra barata, guerra de alta tecnología y pocas tropas terrestres – e Israel haciendo la mayor parte del trabajo sucio. Más allá de las divisiones internas entre los capitalistas financieros dominantes de EEUU, sus aliados internacionales tienen intereses que no siempre coinciden con los de ellos.
Israel es un caso buen ejemplo. El Primer Ministro Benjamín Netanyahu ve a Irán como una amenaza inmediata a la existencia de Israel. Lanzando grandes bombas destructoras en Palestina, le envió una advertencia a Irán (bombas proveídas por Obama). Este ataque horrorizo la facción de la clase dominante de ExxonMobil-JPMorgan Chase, quienes no están preparados para la posible larga y costosa guerra que vendría. Pero le gusto a Sheldon Adelson, quien lo apoya. Adelson es dueño de periódicos en Israel, (además de casinos en China, principal rival imperialista de EEUU), Adelson prometió $100 millones al grupo de Romney. Esperaba que la administración Romney le diera la luz verde a Netanyahu y a la vez redujera los ingresos de impuestos – una clara amenaza para los planes a largo plazo de los capitalistas financieros.  
Conflictos Crecen conforme se alista mas la guerra
Como lo reporto el Huffington Post (20/11/12), Anthony Cordesman, un prominente estratega en el Centro para Estudios Internacionales y Estratégicos, financiado por Rockefeller, advierte sobre un extenso conflicto, casi listo – uno que podría tener misiles iraníes dirigidos hacia tropas americanas en Afganistán, cohetes y ataques guerrilleros de Hezbolla en el norte de Israel desde Líbano, buques de guerra de EEUU peleando a través de los campos minados para re-abrir el Estrecho de Ormuz [el conducto de grandes suministros de petróleo] y humo saliendo de tanqueros y campos petroleros destruidos en el Golfo Pérsico.”
Cordesman hablo de los ataques planeados por Netanyahu contra Irán, ataques que Obama pudo posponer hasta después de su elección, pero parece inminente después de la incursión en Palestina. Para retrasar esa acción precipitada, Obama desvió a la Secretaria de Estado Hillary Clinton de su viaje de construcción de alianzas contra China en Asia y la mando a Cairo y Tel Aviv para crear un acuerdo en Palestina. Eso freno el plan en Irán de Netanyahu, por el momento. Pero en una demostración de la debilidad de la diplomacia de EEUU, el Presidente de Egipto, Mohammed Morsi, representando la Hermandad Musulmana, parlamento su poder como agente Hamas-Israel en una dictadura pro islámica y anti-EEUU.
Aun cuando la guerra ardía en Palestina y Siria, Obama continúo con su plan de reunirse con gobernantes de Vietnam y Camboya, durante la reciente cumbre de la pro EEUU, Asociación de Naciones del Sureste de Asia. Su enfoque era un testamento de cuan importante es la competencia entre los imperialistas de EEUU y China. A pesar de todos los esfuerzos de Obama, esta alianza regional es incierta.
¿Pelearían millones de trabajadores vietnameses y camboyanos por los mismos patrones estadounidenses que masacraron cinco millones de miembros de sus familias en las décadas de 1960 y 70? El racismo que impulsara estos ataques genocidas refleja lo barato que es la vida de los trabajadores asiáticos para los patrones de EEUU.
Surge Lucha de Clases
El contrapunto a las necesidades de guerra de los gobernantes de EEUU, es el surgimiento de la lucha de clases en el mundo entero. Millones de trabajadores textiles han hecho huelga en Pakistán y Bangladesh. Millones más han marchado contra la pobreza impuesta por las leyes de austeridad de los patrones europeos. Luchas antirracistas y de estudiantes y maestros brillan en Haití. Cientos de miles de mineros de África del Sur han luchado contra patrones de corporaciones mineras apoyadas por EEUU y Gran Bretaña. Protestas contra policías racistas asesinos han irrumpido en varias ciudades de EEUU. Por primera vez la multimillonaria Wal-Mart ha enfrentado una huelga en EEUU contra los salarios de hambre y las condiciones explotadoras.  
Miembros y amigos del Partido Laboral Progresista han estado activos en muchas de estas luchas. Nosotros apoyamos y a veces damos liderato a las luchas de los trabajadores mientras hablamos de nuestra meta, el comunismo. Estas ideas nos señalan el camino para acabar con la explotación capitalista: una revolución para derrocar el sistema racista y sexista de ganancias y establecer el gobierno obrero. ¡Únetenos!