La devastación y el caos que los trabajadores enfrentan en Ucrania, con los gobernantes de EEUU y Rusia armando ejércitos opuestos, revela lo que los patrones ofrecen a la clase trabajadora internacional. Mientras que la lucha esta confinada, por el momento, al este de Ucrania, la retórica hostil por ambos bandos, aumentan las amenazas del combate armado por toda Europa del Este y más allá, esto es lo que Reuters reporto:
El lunes más de 45,000 tropas rusas, aviones de guerra y submarinos empezaron ejercicios militares por casi todo el país. [16 de marzo]…el presidente Vladimir Putin dijo que la flota Norteña Naval estaba preparada para el combate durante los ejercicios en el norte ártico de Rusia, aparentemente diseñados para empequeñecer los entrenamientos en el vecino Noruega, miembro de la OTAN.
OTAN, Organización del Tratado del Atlántico Norte, es el bloque pro militar de los imperialistas estadounidenses en Europa del Este. Tres días más tarde, Rusia anunciaba que había “doblado el número de trapas que participaban en los ejercicios…a 80,000” (Agence France-Presse, 19/01/15).
El grupo de expertos de los guerreristas estadounidenses (un grupo de investigación que define opciones políticas) es el Consejo en Relaciones Exteriores (CFR, siglas en ingles). Representando el ala del capital financiero dominante de la clase dominante de EEUU, el CFR advirtió:
Las fuerzas armadas rusas están en medio de una revisión histórica…las intervenciones rusas en Georgia en el 2008 y Ucrania en el 2014-2015…demuestran que el presidente Vladimir Putin está preparándose para utilizar su peso militar para re-establecer la hegemonía rusa en su cercano exterior…el presupuesto militar ruso se ha más que duplicado en la última década (20/3/15).
Guerras Mundiales: Cunas de la Revolución
Es decir, la competencia entre los capitalistas estadounidenses y rusos – por recursos, mercados y bastiones geopolíticos – está escalando. Las tensiones actuales siguen el análisis de 1917 de Vladimir Lenin: Imperialismo: La más Alta Etapa del Capitalismo. Como explico Lenin, países capitalistas “avanzados” como EEUU, China, y Rusia están constantemente re-dividiendo el mundo a través de la guerra.
Mientras los patrones en ambos países tratan de motivar y disciplinar a la clase trabajadora preparándose para un enfrentamiento imperialista más grande, millones de trabajadores enfrentan una creciente crisis económica, desempleo racista, e intensificación del terror. Pero Lenin también mostro que el sistema capitalista mundial es debilitado temporalmente por la guerra imperialista, dándole a la clase trabajadora las oportunidades para una revolución. La Primera y Segunda Guerra Mundial, los dos conflictos globales de la historia, fueron crisoles para los movimientos revolucionarios. Esos grandes avances fueron revertidos después, cuando ambas revoluciones, rusa y china, se convirtieron en sistemas basados en las ganancias con una elite capitalista. Pero hoy, el Partido Laboral Progresista está organizando en 27 países para aplastar el capitalismo de una vez por todas con una ¡revolución comunista!
Una Línea Sobre la Arena
En The Grand Chessboard (1997), el proyectista de guerra Zbigniew Brzezinski delineo la necesidad del imperialismo estadounidense de conquistar los países de Asia Central, como Afganistán. Antes de eso, como consejero en seguridad nacional, ayudo a escribir la Doctrina Carter, la cual marcaba una línea en la arena del Medio Oriente. Esta política, apoyada por cada presidente estadounidense de los últimos 35 años, dice que EEUU defenderá sus intereses petroleros en el Golfo Pérsico “de cualquier manera posible, incluyendo la fuerza militar.” El 9 de marzo, Brzezinski le dijo al Centro para la Estrategia y Estudios Internacionales, otro grupo de expertos de la clase dominante:
Hoy, el ejército ruso esta…a tres o cuatro años de estar listo para una sostenida campaña militar contra un ejercito bien armado y profesional, específicamente [los EEUU. Esto es impresionantemente similar a la situación en 1938-1939, cuando…Hitler decidió atacar Checoslovaquia.
Pero si los patrones que controlan Rusia deciden que pueden esperar a incrementar sus tropas terrestres, ellos tienen una opción más rápida: armas nucleares. Como reporto el noticiero ABCNews (19/3/15):
Rusia tiene planes de estacionar misiles de vanguardia…y desplegar bombarderos nucleares…debido a las amargas tensiones con Occidente sobre Ucrania…los misiles, con capacidad de golpear blancos enemigos hasta a 310 millas de distancia con alta precisión, pueden ser equipados con cabezas explosivas convencionales o nucleares. Desde Kaliningrado, ellos podrían llegar a varios estados miembros de la OTAN.
No es solo Moscú, que apresura el brote de la Tercera Guerra Mundial [ver recuadro]:
Un ejercicio militar estadounidense cerca de la frontera rusa…programado para el sábado, involucrara un convoy de 120 vehículos Army Strykers. Por diez días los vehículos de combate pararan en una área comunitaria diferente de la frontera por noche para mostrar la capacidad de las fuerzas estadounidenses de transportar tropas rápidamente, y asegurar a Estonia, Letonia, Lituania, y Polonia del compromiso de la OTAN (Military.com, 20/3/15).
De Guerra Mundial a Guerra de Clases
Nuestra clase no tiene nada que ganar en esta despiadada batalla entre patrones. Ambos, Putin y Barack Obama pelean sus guerras representando a los multimillonarios capitalistas a quienes les sirven. Ambos están dispuestos a sacrificar las vidas de millones de trabajadores. Mientras tanto China continúa aumentando su gasto militar para proyectar su poder más allá de Asia a África y América Latina, el “traspatio” del imperialismo estadounidense desde los 1820s.
El Partido Laboral Progresista está organizando un movimiento de masas de millones de trabajadores en todo el mundo para destruir los planes de masacre de los patrones. Estamos involucrados en batallas antirracistas grandes y pequeñas, en el trabajo, universidades y en los ejércitos de los patrones. Más que nada, nos preparamos para convertir su próxima gran guerra en una guerra de clases por la revolución comunista. ¡Únetenos!
- Information
- Imprimir
Trabajadores de la Salud y Estudiantes Contra el Sistema Criminal de Injusticia
- Information
- 26 Marzo 2015 77 visitas
Washington DC, 14 de Marzo — Más de 40 trabajadores de salud pública y estudiantes participaron en una reunión anti racista. Esta estuvo dirigida por tres trabajadores negros que discutieron las desigualdades en la salud mental y el aislamiento en solitario de los trabajadores negros y Latinos encarcelados, el racismo, la brutalidad policial, y la audiencia de arbitraje a vísperas programada para Junio para discutir la racista revisión de antecedentes del sistema del transporte público del distrito.
Durante el tiempo asignado para la discusión, la gente denunció al capitalismo y el lucro que produce el trabajo esclavo de los encarcelados. Otros condenaron los arrestos en Ferguson, llamando a que se luche por más trabajos. Un miembro del Partido Laboral Progresista (PLP) declaró que los encarcelamientos masivos, producto de la guerra contra las drogas – una guerra contra los trabajadores negros – encarcelaba a decenas de miles de jóvenes negros para sacar de la calle a estos luchadores militantes en potencia. Los miembros del PLP conocieron muchos estudiantes nuevos, trabajadores y profesionales de la salud en el programa. Diez se inscribieron para colaborar en la campaña del Metro contra la revisión de antecedentes racista y para participar en la próxima conferencia sobre la encarcelación masiva, la salud mental y el desamparo en la vivienda.
Antes, el 28 de febrero, un líder del PLP y un amigo del partido les dieron una charla a 100 estudiantes en una sesión de la convención de la Asociación Americana de Estudiantes de Medicina (AMSA) sobre la encarcelación masiva y la historia de la opresión racista. Los estudiantes respondieron con entusiasmo a la presentación y discutieron vigorosamente las estrategias para organizar contra el racismo. Los estudiantes en Maryland han organizado un grupo de discusión sobre la justicia social mientras que otros han organizado “muertes” de pantomima de los estudiantes de medicina para denunciar los asesinatos cometidos por la policía. Los estudiantes locales, así como los de otros estados, nos dieron su información para que nos comuniquemos con ellos y participar en las campañas anti racistas por el cuidado de la salud. El capítulo de la Universidad George Washington (GWU) de la Asociación Nacional de Estudiantes de Medicina (SNMA) organizó una muerte en pantomima y auspició programas para entrenar activistas estudiantiles.
Durante los últimos dos años el Comité de Desigualdades de la Asociación de Salud Pública de Washington Metropolitano (MWPHA) ha llevado a cabo una campaña contra la política de revisión de antecedentes del Metro. La organización ha estado luchando para que se contrate a los ex presos y no se les eche del trabajo. Los miembros del PLP han sido parte importante de este trabajo. El tema se ha hecho conocido en el distrito y ahora los líderes del MWPHA y de la Escuela de Salud Pública de GWU se han integrado a las actividades para expandir la lucha.
Durante la Semana Nacional de la Salud Pública en abril, el decano de la Escuela de Salud Pública de la Universidad George Washington dará una charla sobre la encarcelación masiva. El próximo otoño, la conferencia anual de la MWPHA estará enfocada en la encarcelación, la salud mental y el desamparo en la vivienda. La Asociación de Estudiantes de Salud Pública (PHSA) también va a presentar una sesión sobre la organización de bases e invitar a un miembro del partido para que de una charla.
Los miembros de AMSA, SNMA y PHSA están planificando trabajar en colaboración en estos temas. Esto va a ser un paso importante hacia la unidad multirracial y el activismo de los estudiantes en relación al tema de la salud.
A pesar de estos acontecimientos alentadores, todavía falta una aguda discusión sobre el capitalismo y la necesidad de una revolución comunista con el gran número de trabajadores y estudiantes anti racistas que han participado en nuestro trabajo. El capitalismo no se puede reformar. El comunismo es la manera de curar los males de esta sociedad racista. Estas verdades se deben discutir de manera más clara en nuestros foros, y presentar la visión de una sociedad comunista a la amplia masa de gente.
El PLP está organizando un grupo de estudio con muchos de estos nuevos activistas para discutir estos temas. Queremos que estos nuevos activistas se integren al partido, marchen el 2 de mayo en Nueva York, y participen en la reunión nacional de la Asociación Americana de Salud Pública este otoño para desarrollar estas luchas con los estudiantes de Salud Publica Radical en Chicago (vea el DESAFIO del 11 de marzo, 2015)
Luche contra el Racismo en la Salud Pública y en la Medicina
Las rebeliones que se han dado como reacción a los asesinatos cometidos por la policía de Ferguson y Staten Island han tenido un impacto en la conciencia de las organizaciones de medicina y de salud pública del país. Los camaradas del PLP debemos usar esta oportunidad para promover el crecimiento del partido y del movimiento anti racista. Veamos estos dos temas de la revista New England Journal of Medicine para darnos una idea de las oportunidades de lucha que puede asumir el PLP:
“#BlackLivesMatter — Un Desafío a las Comunidades Médicas y de Salud Pública”, http://www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMp1500529
“Prejuicio, Vidas de la Comunidad Negra, y Medicina Académica”, http://www.nejm.org/doi/full/10.1056/NEJMp1500832)
- Information
- Imprimir
Lucha de Maestros Demuestra Necesidad de Comunismo
- Information
- 26 Marzo 2015 71 visitas
LOS ANGELES, 26 de Febrero — 15,000 maestros y simpatizantes se plantaron frente al municipio de Los Ángeles hoy para demandar menos estudiantes por clase, más personal en las escuelas, y aumentos de salarios. La mayoría de las clases tienen alrededor de 42 estudiantes por cada materia, a veces llegan a 55 si la materia es de especialidad. Muchas de las escuelas tienen una enfermera solamente dos días a la semana, y consejeros tienen que programar hasta 500 estudiantes por semestre.
Los padres obreros latinos y negros en las ciudades no pueden suplementar el presupuesto escolar, y por eso estos estudiantes son los más golpeados por falta de servicios. Escuelas extremadamente segregadas, y décadas de políticas racistas contra escuelas negras y latinas y sus comunidades, han dado como resultado grandes disparidades en la educación y una excusa para que los patrones sigan súper explotando a la clase trabajadora negra y latina.
Todo esto ha indignado a estudiantes, padres y maestros. Muchos están listos para la lucha. El sindicato de maestros está usando esta indignación para “negociar un mejor contrato” con el distrito escolar. Como siempre, tratan de desviar la rabia lejos de los verdaderos enemigos – la clase dominante y el sistema capitalista explotador y racista – quieren enfocarse en conseguir un aumento de sueldo y posiblemente algunas concesiones, como 39 alumnos por clase.
En vez de animar a los trabajadores hacia una huelga y enfrentar directamente a la clase dominante, ellos nos llevan por un largo y tedioso proceso que está diseñado para corroer el poder de los trabajadores. Después de la negociación nos dicen que habrá una “mediación” después “una determinación de los hechos” y es entonces que podremos hacer huelga. Para cuando esto ocurra, el año escolar habrá terminado. Sin embargo, el sindicato está haciendo un llamado de boicoteo de las reuniones de los facultativos y usaremos esto para organizar plantones en el campus y construir el trabajo revolucionario en las escuelas.
Un PLPeista en la escuela ha estado construyendo el partido aquí por 10 años y ha reclutado a un padre, y además es respetado como luchador antirracista por sus compañeros de trabajo y estudiantes. Los lectores del DESAFIO aún no lo ven como esencial, o al PLP, para la lucha. Tenemos planes de hablar más con ellos dentro y fuera del campus sobre porque la única solución es la revolución comunista.
Estamos organizando reuniones semanales en la escuela llamadas “lucha del viernes” donde socializamos y discutimos organización de luchas en la escuela. Con el tiempo queremos convertir esto – quizás algo aparte – en un grupo de estudio-acción que lea y discuta el DESAFIO y haga planes de cómo usar la lucha por reformas como escuelas por el comunismo.
La mayoría de la gente trabajadora ha escuchado hablar de Hitler, de la Alemania Nazi, y de los campos de concentración como los de Auschwitz, que se crearon bajo el gobierno fascista en Alemania. Los trabajadores en los EEUU deben haber escuchado sin duda del reino de terror del Ku Klux Klan, y han sido testigos del terror policial desencadenado contra los trabajadores afro-estadounidenses en Ferguson y en muchas otras ciudades del país. El terror del Klan y de la policía, como el de los Nazis, revela el verdadero rostro del capitalismo, sin la máscara de la democracia capitalista. “Fascismo”, una palabra que se usa frecuentemente pero que raramente se define, es un concepto esencial que nos permite entender el dominio capitalista en su forma más racista y violenta.
Fascismo es el dominio capitalista abierto y descarado, un tipo de control que usa la clase dominante capitalista en tiempos de crisis cuando su falsa democracia ya no sirve sus necesidades. Actualmente el fascismo está aumentando en todo el mundo, y el Partido Laboral Progresista está organizando a la clase trabajadora internacional para derrotarlo con la revolución comunista.
Las guerras imperialistas, el racismo, el machismo y la destrucción global son la rutina de la clase capitalista. Al contrario de lo que dicen los políticos hipócritas, las facciones y poderes capitalistas en competencia deben usar la violencia militar y policial para apoderarse de los recursos y posición del otro y convertirse en el poder imperialista mundial dominante.
El fascismo es producto de este tipo de crisis que es endémica al dominio capitalista. La clase capitalista de cada país está compuesta de varias facciones, que representan a los capitalistas que se lucran de diferentes grupos de bancos e industrias. En la medida que la rivalidad entre los diferentes imperialistas se agudiza (por ejemplo, la actual lucha desesperada de los patrones de EEUU por mantener el control del petróleo del Medio Oriente), también se agudizan las rivalidades internas entre las facciones capitalistas de cada poder imperialista, y la forma común de la “democracia” capitalista se desmorona (como en la actual parálisis gubernamental entre la gran banca tradicional y petroleros que apoyaron a Obama y los capitalistas emergentes como Koch, etc., que apoyaron al Partido del Té.)
Una serie de problemas agobiaban a la clase dominante alemana en los años 20 y 30. Después de su derrota en la Primera Guerra Mundial, la economía alemana quedó en ruinas. Millones de trabajadores, incluyendo a los veteranos de guerra que lucharon por Alemania, estaban desempleados o vivían en la desesperación. Mientras se hundía la precaria economía alemana de post guerra escaseaba el trabajo, la inflación acelerada devaluaba la moneda, y las huelgas masivas sacudían al país.
Lo peor para la clase dominante alemana fue la creación de un estado obrero liderado por comunistas en 1917, la Unión Soviética. Millones de trabajadores alemanes se inspiraron con el ejemplo de la Unión Soviética. Muchos buscaron liderazgo político en el Partido Comunista Alemán, llegando al punto de organizar una revuelta y crear una Republica Soviética de corta vida en Baviera en 1918.
El partido más numeroso en Alemania en ese tiempo fue el liberal Partido Demócrata-Social (SPD), que se declaró del lado de la clase trabajadora en discursos y en su plataforma electoral para ganarse la lealtad y los votos de la clase trabajadora. Detrás de bastidores, el liderazgo pro capitalista del SPD se reunía regularmente con los representantes de la banca y la industria alemana, tales como el Banco Deutsche, los magnates del acero Thyssen y Krupp, Volkswagen, el monopolio farmacéutico I.G. Farben (Bayer), y otras compañías que todavía existen hoy en día. Esta sección dominante de la clase capitalista alemana tenía la creciente preocupación durante los años 20 que el SPD no sería capaz de controlar a la clase trabajadora y prepararla para otra guerra imperialista.
Durante todo este tiempo, Adolfo Hitler estuvo muy ocupado organizando veteranos de la Primera Guerra Mundial derechistas y nacionalistas y pequeños comerciantes y empresarios para formar un movimiento llamado el “Partido Nacional Socialista de los Trabajadores Alemanes” o Nazis. El movimiento Nazi no tenía nada que ver con el socialismo, el poder obrero o la Unión Soviética. Muy pocos trabajadores verdaderos se integraron al Partido Nazi antes de 1os años 30. Los Nazis culpaban a los inmigrantes, especialmente a los judíos, y al Partido Comunista por traicionar a Alemania.
En discursos privados Hitler convenció a los grandes patrones del capitalismo alemán que su estrategia de usar a los Demócrata Sociales para controlar a los trabajadores era un fracaso. Las huelgas militantes y los incansables ataques del creciente Partido Comunista contra el Partido Demócrata Social como instrumentos de la clase patronal alemana aumentaron el temor capitalista de que los trabajadores alemanes seguirían el ejemplo de los trabajadores de la Unión Soviética. Hitler declaró que la solución de Alemania era seguir el ejemplo de los fascistas en Italia: deshacerse de los Demócrata Sociales liberales, destruir al Partido Comunista, todos los sindicatos y organizaciones obreras violentamente y aterrorizar y disciplinar a la clase trabajadora en la obediencia.
No todas las facciones de la clase dominante alemana siguieron las propuestas de Hitler, pero cuando el Canciller liberal apoyado por los Demócrata Sociales nombró legalmente a Hitler como el nuevo Canciller de Alemania en 1933, los Nazis, con el apoyo de los grandes bancos e industrias alemanas, arrestaron a todos los directores de las compañías que se habían negado a cooperar. Lo primero fue disciplinar a la clase patronal alemana.
Después, los Nazis se ocuparon de la clase trabajadora, destruyendo primero su más poderosa organización, el Partido Comunista. Los comunistas fueron los primeros en ir a los campos de concentración y los primeros en las cámaras de gas. Y una vez que el Partido Comunista y sus organizaciones afines estuvieron destrozadas, los Nazis tuvieron la libertad para acorralar a los líderes sindicales, judíos, y otros grupos de inmigrantes, e inclusive a los trabajadores asociados con el Partido Demócrata Social: a todos los usaron como esclavos o, después, los enviaron a los campos de la muerte en Auschwitz, Bergen-Belsen, y Dachau.
Los Nazis finalmente se lanzaron en una guerra de aniquilación contra el primer estado obrero, la Unión Soviética. Las patronales de EEUU y Europa armaron a los Nazis hasta los dientes y pusieron sus esperanzas en ellos para derrotar a los soviéticos. Sin embargo, fueron los millones de comunistas, mujeres y hombres organizados por la Unión Soviética los que en última instancia derrotaron a los Nazis hasta en el mismo Berlín. La Unión Soviética también lideró la lucha del movimiento de resistencia contra el fascismo en todo el mundo, y durante este tiempo fue un faro de esperanza para todos los trabajadores de cada continente.
Los comunistas defendieron a la clase trabajadora contra la violencia fascista y el terror racista al mismo tiempo que los líderes capitalistas como Ford negociaban con Hitler por debajo de la mesa para compartir el lucro fascista y las compañías químicas estadounidenses le vendían gas venenoso sin marcadores de seguridad a Alemania para que lo usaran en las cámaras de gas. A pesar de que el viejo movimiento comunista tuvo muchos fallos, incluyendo su lucha por el socialismo en el que se mantuvieron los salarios y las desigualdades, lo que permitió la eventual restauración capitalista en todos los países socialistas, estos fallos no desmerecen los grandes sacrificios de millones de comunistas en su lucha para derrotar el terror fascista.
El fascismo no es un fenómeno único de Alemania, o cualquier otro país. Es producto del capitalismo. Muchos países capitalistas como los EEUU, la Unión Europea, Sud África y otros, son democracias capitalistas, donde a los trabajadores se les permite ciertas libertades. TODOS los trabajadores viven bajo la dictadura de la clase capitalista. El fascismo no es diferente del capitalismo, es una táctica que la clase capitalista usa para mantenerse en el poder y mantener su dictadura de clase sobre la clase trabajadora.
El comunismo es lo opuesto del fascismo. El comunismo es la dictadura de la clase trabajadora. Después que la clase trabajadora haya derrocado a la clase capitalista y abolido los salarios y el dinero, los trabajadores administrarán la sociedad y la protegerán con la fuerza para prevenir que los capitalistas tomen otra vez el poder. El Partido Laboral Progresista lucha por este objetivo.
- Information
- Imprimir
Elecciones en Israel: Aplastar el Estado Racista con la Revolución Obrera
- Information
- 26 Marzo 2015 73 visitas
Tel-Aviv, 17 de Marzo — Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel desde el 2009 (y antes de eso de 1996 a 1999) fuer re- elegido una vez más. Este, abiertamente fascista, sirviente del multimillonario estadounidense Sheldon Adleson, gana las elecciones advirtiendo a los votantes que “los árabes están yendo a las urnas en masa.” Esta treta racista llevo a muchos israelíes a votar por él, y no por la competencia derechista. Con esto logro una aplastante victoria sobre el campo sionista – el llamado partido “izquierdista” que se basa en el viejo partido obrero y elementos del ya difunto partido Kadima.
Ahora el racismo está a la orden del día en ambos lados del campo político sionista - el campo de Netanyahu con su propaganda anti-palestina, igual que la “izquierda” del movimiento sionista, es decir, el viejo Partido Obrero (quienes ahora son denominados “campo sionista”). Varias personas en la órbita del Partido Obrero, como el “publicista” Yair Garbuz, expresaron su descontento por perder la elección, con términos descaradamente racistas sobre “los primitivos judíos Mizrachi quienes besan los Mezuzot y adoran talismanes” otro racista, el profesor Amir Herzroni, se atrevió a decirle a una mujer Mizrachi que llego a la entrevista junto con él, “hubiera sido mejor si sus padres se hubieran quedado a pudrirse en Moroco.”
Estas elecciones nos mostraron la verdadera cara de los sionistas: racistas y marionetas del imperialismo estadounidense, y odian a la clase trabajadora.
Mucha gente de izquierda estaba molesta por el resultado de estas elecciones. Pero nosotros como comunistas señalamos a nuestra base que no debemos preocuparnos que un títere de los patrones derrote a otro títere; aun si Herzog (del campo sionista) hubiera ganado las elecciones, aun así enfrentaríamos los mismos aumentos en impuestos, recortes presupuestarios, y más guerras, sin mencionar el continuo acoso a Gaza.
Netanyahu es el sirviente del multimillonario Sheldon Adelson, es verdad, pero Herzog es también esclavo de los patrones locales como lo es el magnate de prensa Arnon Moses, dueño del periódico Yediot Ahronot, que también es servil lacayo del ala Rockefeller del capitalismo estadunidense. Las elecciones fueron una pelea entre patrones racistas; nosotros no somos parte de ningún bando en esta pelea de amos, y debemos enfocarnos en la verdadera lucha para la emancipación de la clase trabajadora y para acabar con el apartheid sionista en Israel-Palestina.
También señalamos que a aproximadamente 4 millones de palestinos que viven en áreas bajo el yugo militar israelí no se les permite participar en estas falsas elecciones; los gobernantes deciden a quien se le permite votar y quien cuenta los votos, y después se jactan de que su país es una “democracia.” Una democracia en donde a la tercera parte de su población no se le permite votar, esas son las elecciones capitalistas.
El camino hacia la liberación, les decimos a los trabajadores con quienes hablamos de esto, es a través de la revolución comunista y la construcción de un movimiento de masas trabajadoras de todas las etnias – Ashkenazi, Mizrachi, judíos, palestinos, árabes, inmigrantes y refugiados. Los ricos usan el racismo y ahora intensifican sus ataques a nuestra clase, encarcelando a cientos de refugiados en lo que llaman “instalaciones residenciales abiertas” en Holot (es decir, campos de concentración) sin juicio.
Asesinan a cientos de palestinos en Gaza, y para el trabajador judío preparan más guerras imperialistas donde asesine o muera para que los patrones sigan lucrando. Nuestra respuesta es construir un movimiento de trabajadores de todas las etnias para la liberación de nuestra clase. Ya es hora de organizarse y acabar con este sistema maldito de guerra y opresión. Debemos reemplazarlo con un sistema que sirva a nuestra clase.
No es el momento de desesperanza, es el momento de construcción de un nuevo sistema alternativo de base.